10 cosas importantes que todo cristiano debe saber acerca de la Biblia.

1. La Biblia es a la vez un libro divino y un libro humano.

Cada palabra de la Biblia es inspirada por Dios (2 Timoteo 3:16). El habló a través de los diversos autores humanos, usando sus personalidades y estilos de escritura únicos para comunicar exactamente lo que quería decir (2 Pedro 1:20-21).

2. La Biblia es una historia.

La Biblia no es simplemente una colección de refranes religiosos o una antología de las experiencias religiosas de varias personas. La Biblia nos dice la verdadera historia del mundo, la manera en que las cosas verdaderamente son y deben ser. Comprender la trama básica de la Biblia que va desde Génesis hasta Apocalipsis nos ayuda a entender mejor cada pasaje intermedio.

3. La Biblia se centra en Dios y sus planes para el mundo.

Dios es el personaje principal de la Biblia. Él creó a la humanidad para reflejar su imagen gobernando sobre la creación como mayordomos bajo su autoridad. Pero Satanás engañó a Adán y Eva para que se rebelaran contra Dios, hundiendo toda la creación bajo la maldición del pecado y la muerte. El resto de la Biblia despliega gradualmente el plan de Dios para redimir a su pueblo de su pecado, derrotar a su mayor enemigo Satanás y transformar la creación para que su pueblo redimido pueda gozarse para siempre.
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4. La Biblia no está escrita a nosotros sino para nosotros.

Ninguno de nosotros somos antiguos israelitas siguiendo a Moisés por el desierto. Ninguno de nosotros somos israelitas del octavo siglo (BC) que viven con la declinación del reino del norte de Israel. Ninguno de nosotros somos judíos languideciendo en el exilio en Babilonia, preguntándonos si Dios nos ha abandonado por completo. Ninguno de nosotros somos cristianos del primer siglo que viven en Roma, Filipos o Éfeso. Pero como pueblo de Dios, la Biblia fue escrita para que nosotros nos instruyéramos, fortalezcamos nuestra perseverancia en la fe y produjéramos esperanza en el cumplimiento de las promesas de Dios (Romanos 15: 4, 1 Corintios 10:11).
El Espíritu de Dios usa la Biblia para transformarnos para reflejar la imagen de Jesucristo en cada área de nuestras vidas.

5. La Biblia es la herramienta de Dios para transformarnos.

El pecado ha deformado nuestra capacidad de reflejar claramente la imagen de Dios. El Espíritu de Dios usa la Biblia para transformarnos para reflejar la imagen de Jesucristo en cada área de nuestras vidas. Al leer la Biblia como individuos y con otros creyentes, Dios nos hace crecer en la piedad. Dios nos ha dado a otros cristianos para aprender y aprender con la Palabra de Dios. A medida que escuchamos la Palabra predicada y enseñada, estudiemos en pequeños grupos y hablemos de ella con otros creyentes, Dios usa su Palabra para transformarnos en reflejos más claros de su Hijo Jesucristo.

6. La Biblia nos muestra la gloria de Dios y la belleza de Cristo.

Al leer la Biblia vemos la gloria de Dios a través de su carácter, su conducta y sus preocupaciones. Vemos al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo mostrando sus muchas perfecciones al cumplir los propósitos de Dios en este mundo.

7. La Biblia revela un patrón básico para la vida cristiana.

En el centro de la vida cristiana hay un patrón de arrepentimiento y fe, que son dos caras de la misma moneda. El arrepentimiento es alejarnos de nuestro pecado y la fe es volvernos a Dios en confianza. No son sólo el punto de entrada a la vida cristiana. Son el aire que respiramos en nuestra relación permanente con Cristo.

8. La Biblia nos muestra nuestro pecado.

La Palabra de Dios penetra en el centro de nuestro ser, revelando cómo nuestros pensamientos, intenciones, actitudes, deseos y acciones están desfasados ​​con los caminos de Dios (Hebreos 4:12-13). La Biblia puede incluso revelar el pecado escondido actuando en nuestras vidas (Salmo 19:12; 90: 8).

9. La Biblia nos muestra el evangelio.

La Biblia no se detiene en revelar nuestro pecado; también revela cómo Dios aborda a nuestro pecado a través del evangelio. La Palabra de Dios explica lo que Jesús ha hecho por nosotros como nuestro gran sumo sacerdote (Hebreos 4: 14-16). Jesús puede simpatizar con nuestra debilidad porque también él fue tentado. Pero a diferencia de nosotros, nunca pecó. Debido a su perfecta obediencia y muerte sacrificial en la cruz, podemos recibir misericordia y gracia en nuestro tiempo de necesidad.

10. La Biblia se aplica a toda nuestra vida.

Dios no sólo está interesado en cambiar cómo actuamos. Puesto que el propósito de Dios es hacernos reflejos perfectos de Jesús, él nos transforma de adentro hacia afuera. Él cambia la forma en que pensamos, lo que creemos, e incluso lo que deseamos. No hay parte de nuestras vidas que la Biblia no hable.
Por Matthew s. Harmon
Fuente: Evangelio.Blog / Cristianos Al Día

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